Haciendo el Gaijin

Que nadie se asuste, GAIJIN es la palabra que usan los japoneses para decir “Guiri” y suelen usarlo de un modo algo despectivo, vamos, como nosotros guiri. Por suerte aun no me lo han llamado ni he sentido miradas malintencionadas.

¿Dónde lo dejamos? Ah si, en el vuelo desde Moscú. Después de “amanecer” nos trajeron el desayuno, los rusos no fallan… vaya crepe de frambuesa más rico; como la azafata rusa hablaba un poco raro, cuando nos pregunto sobre si queríamos “no sé qué o no sé cuantos” espere a que la Japonesa de al lado eligiera y respondí con un “the same”, fácil.

Y bueno, como esperábamos, a las 10 de la mañana tomamos tierra. No había mucha gente en el aeropuerto y nos recibieron muy bien, rellenamos algunos formularios donde declarábamos lo que llevábamos encima y listo, en menos de 30 minutos ya estábamos oficialmente en Japón. En ese rato estuve hablando un poco con una pareja de españoles, al parecer la maleta de él se había quedado en Moscu. Me despedí y me dirigí al exterior.
¡¡Por dios que calor y que humedad!! No tardé ni 10 segundos en volver al fresquito de la terminal. Entonces fue cuando ocurrió, de repente me entró un tremendo complejo de “pequeñez”, nunca había salido al extranjero, mi ingles esta superoxidado (comprobado con la chica koreana) y de japonés solo se algunas palabras sueltas. Pero no me duró más de 5 minutos, empecé a recordaros a todos vosotros y palabras de ánimo vinieron a mi cabeza así que finalmente lancé un decidido “GAMBATTE!!!” y me dirigí a comprar el billete de Bus para Tokyo. Por desgracia el RAIL PASS debí haberlo comprado en España, así que ahora ya no puedo. Aunque veré si se me ocurre algo, lo mismo lo compro por internet y os pido a alguno que me lo envíe al Ryokan de Kyoto y al menos me salvo de pagar los últimos trenes y metro.

Bueno, lo dicho, por fin salí del aeropuerto (tras coger propaganda de un hotel barato entre Minowa y Senju, en el extrarradio de Tokyo por así decir). Cosas que me sorprendieron en el viaje en bus:
- Me recogieron mi mochilón y le pusieron una pegatina, me la devolverían al llegar a mi parada (50 minutos de viaje)
- El paisaje, todo increíblemente verde, campos de arroz, bosques super densos… impresionante.
- Los cochazos, pude reconocer algunas marcas como BMW, Toyota y Nissan, pero sus modelos eran diferentes a los europeos y algunos sonaban como auténticos demonios.
- Al llegar a la parada en el centro de Tokyo, había un empleado de la compañía que me entregó el mochilón y me ayudó cordialmente a ponérmelo.

Al poner los pies en la acera ya empecé a quedar boquiabierto, y creo que es una sensación que no se irá hasta que pise de nuevo España.

Me dirigí entonces a la estación de Minami-Senju y de allí, tras dar algunas vueltas para orientarme, hasta el NEW HOTEL KOYO.
Según Nestor (Nesan), es uno de los barrios más “marginales” de Tokyo, pero según él, aquí el peor barrio es tan seguro como el mejor de Madrid. Y así lo he podido comprobar por ahora, los edificios se ven viejos y algunos callejones mas estropeados, pero la gente es muy amable en los establecimientos y por la calle se respira tranquilidad, incluso cuando he andado de noche.

El recepcionista me atendió en perfecto inglés, casi no tiene acento japonés y me enseñó las instalaciones. Mi habitación es pequeña, tiene un armario, una tele y dos paneles de tatami; es de tipo japonés y duermo en futón. Pensé que sería más incómodo, pero nada de eso; quizá un poco difícil encontrar la postura por la falta de costumbre, pero se duerme bien.
Lo primero que hice fue ducharme y luego me eché una siesta… que se alargó en exceso, por lo que no fui a Akihabara finalmente. Aquí anochece sobre las 19.00h, por lo que salí a dar un paseo por la zona de Minowa y tomé mi primera cena Japonesa en un pequeño local a 5 minutos a pie del hotel. Un buen cuenco de ramen, un bol de arroz y Gyoza, todo riquísimo por no más de 11€, es más de lo que tengo pensado gastarme por cada comida o cena, pero me lo comí todo por pura gula, solo con el Ramen habría quedado satisfecho, o incluso con el arroz.

A las 22.00h aproximadamente volví al hotel y, cuál fue mi sorpresa, la pareja que conocí en el aeropuerto se alojaba también en el mismo lugar. Estuve hablando un rato con el chico y resulta que tienen una web de mochileros jajaja cosas de la vida, van a estar 15 días, así que nos intercambiamos los correos por si necesitamos algo en estos días.

Me fui entonces para la cama… y “oh sorpresa” ¿¿por qué mi cama esta manchada de sangre?? Jajajaja no os asusteis, solo algunos restregones en la parte de las piernas… me acerque al escenario del crimen y… ¡¡¡CHINCHEEEES!!! Jajajaja maaaadre mía, fui a hablar con el recepcionista que estaba en el pasillo limpiando y me dijo que le sacara el futon, le expliqué que tenía bichos y cuando lo vio soltó un sonoro:
MASAKA!!!

Que viene siendo algo así como “no puede ser”, después de preguntarme si venía de algún otro hotel me pidió mil disculpas, debían venir del tatami. Así que me cambió de habitación asegurándome que nunca antes había visto esos bichos, casi partiéndose por la mitad al pedirme perdón por el contratiempo. Me dieron una habitación igual, pero desde la que pillo la wifi del hotel a la perfección, así que… ARIGATO GOZAIMASU, CHINCHES!!!

Ya reinstalado me conecté un rato por aquí a acabar con la poca batería que me quedaba, hable con algunos de vosotros y con mis padres, vi algo de anime en directo (Arakawa under the bridge y Working!) y después… a dormir.

Así el primer día llega a su fin, no ha sido muy intenso pero el JetLag no me dejó cuerpo para mucho más. Creo que lo que más me ha sorprendido por el momento es que las calles están LIMPISIMAS a pesar de que apenas hay papeleras. También que cada 50 metros hay una máquina expendedora de bebidas (salen a 1€-1.50€ aprox) ¡¡¡hay que buscar los carteles amarillos de oferta!!! Ah si, y está todo lleno de plantas puestas por los mismos vecinos y todo plantado de árboles, ya he visto Acer platanoides, Ginkgo biloba y algunos olmos. Es una vista totalmente diferente a la que estoy acostumbrado.

Eso sí, el clima es equiparable a cuando en Málaga pillamos esos días de Calor+Humedad en Agosto… pero me da a mí que esta va a ser la tónica general para todo el viaje. Un precio pequeño para una aventura tan grande, ne?